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28/09/2015

La Constitución de la República del Ecuador determina que “la educación es un bien público y, por ello, su oferta y su calidad, son responsabilidad del Estado” (1). Este mandato se concreta a través del Ministerio de Educación, como principal entidad responsable de que la educación sea considerada como un derecho fundamental a las y los ecuatorianos.

Para lograr esta meta, el MinEduc tiene que dar un salto cualitativo en lo que se refiere a la visión y misión del sistema educativo que Ecuador requiere. Como afirma la experta en temas educativos Inés Aguerrondo “el desafío actual consiste en cómo pasar de las estructuras públicas tradicionales, que tenían como meta la administración del gobierno, a la nueva necesidad de la gestión de las políticas públicas” (2).

Por su parte, Mahieddine Saidi (3) delinea tres factores importantes, que deben ser tomados en cuenta, cuando se trata de analizar la organización de un Ministerio de Educación, en términos de la eficiencia, efectividad y sustentabilidad de las políticas educativas, su diseño e implementación. El primero de estos factores analiza la capacidad de formular políticas educativas; el segundo factor atiende a la capacidad de un ministerio para implementar y gerenciar efectivamente dichas políticas; el último factor es la capacidad de un ministerio de monitorear y evaluar los resultados de una política y de proponer reajustes.

Estos planteamientos teóricos sirvieron como marco orientador para plantear un trabajo conjunto entre el MinEduc del Ecuador y la VVOB, con la finalidad de desarrollar un conjunto de políticas públicas focalizada al fortalecimiento del Bachillerato Técnico, subsector educativo priorizado por el Ministerio para la acción de la cooperación flamenca en el país.

Lo primero que requiere el diseño de políticas públicas de alto impacto es información de calidad, para lo cual se desarrollaron dos estrategias simultáneas, a través de la contratación de consultorías especializadas. La primera consultoría entregó un amplio diagnóstico sobre los principales hitos históricos del Bachillerato Técnico, su situación actual en Ecuador y los potenciales aportes de este subsector para el desarrollo local y nacional. La segunda consultoría produjo un estudio focalizado en un territorio (Zona 4) para diseñar un proceso que permita articular la oferta formativa con la demanda laboral de manera coherente y consistente. El estudio promovió resultados de alto impacto, razón por la cual se está replicando a nivel nacional, bajo la responsabilidad directa del MinEduc.

Otro de los aportes fundamentales dentro de este proceso de generación de política pública fue incidir sobre la inadecuada capacidad para documentar y organizar el diálogo entre los actores clave de la política. En vista de esta dificultad, la VVOB asumió un rol articulador o de puente entre los actores técnicos―que contribuyeron de forma activa y comprometida a la construcción de contenidos sobre política pública para Bachillerato Técnico― y los actores políticos―que aportaron con direccionamiento estratégico, validación y aprobación―. Este diálogo técnico político permitió la construcción de espacios de reflexión profunda sobre la necesidad urgente de una visión renovada del Bachillerato Técnico ecuatoriano, que dio como resultado una nueva visión y un nuevo modelo de gestión, que actualmente sirven como referente para la planificación operativa a partir del 2015.

Finalmente, es importante destacar la atención que la VVOB puso en el fortalecimiento de capacidades dentro del Ministerio de Educación. Desde el inicio la sostenibilidad estuvo incorporada en la planificación y ejecución de este proceso. Algunas de las acciones que se concretaron en este sentido fue el desarrollo de procesos de capacitación sobre construcción de política pública  dirigidos quienes son responsables de tomar decisiones en sus equipos técnicos respectivos, con la finalidad de actualizar aquellos conocimientos requeridos.

El impacto a gran escala de las políticas públicas de Bachillerato Técnico no puede ser evaluado en el corto plazo; sin embargo, el definir con claridad la misión, visión y estrategias del Bachillerato Técnico fortalece el rol rector del MinEduc y, como consecuencia de ello, promueve la confianza de la sociedad en una educación de calidad a la cual todas y todos los ecuatorianos tenemos derecho.

 

El documento Formulación de las políticas públicas para Bachillerato Técnico está disponible para su descarga haciendo clic abajo.

 

 

 

 



(1) Asamblea Nacional Constituyente. (2008). Artículo 347. En Constitución de la República del Ecuador. Montecristi.

(2) Aguerrondo, I. (2014). La difícil tarea de gestionar reformas educativas. ¿Son los Ministerios de Educación la herramienta adecuada? CLAD, XIX Estado y de la Administración Pública.

(3) Saidi, M. (2001). Organización de los ministerios de educación y capacidades institucionales. IIPE/UNESCO Foro de Políticas La organización de los Ministerios de Educación. París.